LOS 10 MANDAMIENTOS DEL TREKKING
Publicado el 02 agosto 2013.
La Biblia cuenta cómo el profeta Moisés recibió directamente de manos de
Yahveh una lista de órdenes o mandamientos que los israelitas debían
respetar, los Diez Mandamientos…
De acuerdo con dichas escrituras, Moisés subió al Monte Sinaí y
permaneció en su cima cuarenta días y cuarenta noches, al cabo de los
cuales Dios le entregó escritos en dos tablas de piedra los Diez
Mandamientos.
Nosotros, como profetas del deporte al aire libre, hemos
transcrito esas mismas escrituras y las hemos adaptado al trekking, para
que todos podamos hacer una ruta como Dios manda.
1. Estudiarás la ruta a hacer. Hazte con mapas de la
zona y marca la ruta a realizar, para ver los desniveles que vas a
encontrar, el tiempo que te va a llevar la marcha…
2. Planificarás la marcha. Planifica la hora de inicio y
la hora final aproximada, contando con que debes tener horas de luz
suficientes para realizar el recorrido y teniendo en cuenta descansos y
posibles imprevistos. Deja avisado a alguien qué ruta vas a hacer y el
tiempo aproximado que vas a tardar.
3. Mirarás la previsión meteorológica. Fundamental para
equiparte convenientemente. Si echas un vistazo también al tiempo de
los días anteriores podrás hacerte una idea de cómo te vas a encontrar
el terreno: por ejemplo, si ha llovido habrá barro…
4. Prepararás el equipo adecuado. Adapta el contenido de tu mochila según la duración de la ruta y la meteorología.
5. No olvidarás calentar. Antes de tirar para arriba
como una cabra, calienta el cuerpo para evitar lesiones. Céntrate en los
músculos de las piernas: cuádriceps, isquiotibiales… pero sin olvidar
la espalda.
6. Comenzarás a caminar con poca ropa para evitar una
transpiración en exceso al principio. Es preferible comenzar con poca
ropa encima y a los 15 minutos regular las capas que necesites según la
intensidad del esfuerzo y la temperatura exterior.
7. Seguirás un ritmo. Comienza lento para aumentar
progresivamente el ritmo hasta llevar una cadencia de zancadas
constante. Evita los cambios bruscos de ritmo o “calentarte” demasiado
en las subidas. Ya sabes el dicho: “sube la montaña como un viejo para
llegar a la cima como un joven”. Una fórmula “casera” para controlar la
intensidad del esfuerzo (si no llevas pulsómetro) es poder mantener una
conversación a la vez que caminas.
8. Realizarás descansos regularmente. Sobre todo si la
marcha es de larga duración, realiza varios descansos de unos minutos
para hidratarte y comer algo que te reponga los niveles de energía para
segur ascendiendo.
9. Elegirás la técnica adecuada: en los ascensos lleva
el tronco erguido, con el centro de gravedad en la pierna adelantada.
Procura apoyar toda la planta del pie para no sobrecargar los gemelos.
Cuanta más pendiente, más cortos tienen que ser los pasos. Si la
pendiente es muy inclinada, asciende en zig-zag, no a pico. En los
descensos mantén una ligera flexión de las rodillas, tus amortiguadores
naturales.
10. Respetarás la naturaleza.
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Javier Gonzalez - who has written 700 posts on Revista Oxigeno.Javier González es redactor de la revista Oxigeno